RENUNCIA DIVINA

Luego de 7 años en que la gente apenas se recordaba que existiese el Vaticano o incluso recordase que habíamos cambiado de Papa, surge el evento del año, EL PAPA RENUNCIA. Es el primer Papa en hacerlo desde 1415.

Sin embargo, una sencilla renuncia no puede pasar tranquilamente por los ojos de la prensa, no, la prensa se debe comportar como los guardias portuarios en las aduanas. Así como cuando uno se va de vacaciones y tiene que ser revisado de manera minuciosa y con la suposición de que somos psicópatas, traficantes y portadores de bombas, de la misma forma, (y como es usual para los medios de comunicación) la prensa debe suponer que el papa renuncia por una razón más oscura, que hay un gran complot en el Vaticano y ya cuando nuestra sociedad no podía volverse más idiota, surgen las teorías divinas y místicas que siempre terminan prediciendo sin efecto el fin de la era del hombre.

Comencemos por lo primero. ¿Por qué REALMENTE renunció el Papa? Cuando resalto la palabra REALMENTE, es porque, apreciado lector, me gustaría que hiciese un ejercicio. Tome todas las explicaciones proféticas de Nostradamus, Walter Mercado o algún otro estafador astronómico. Tome todas las teorías sobre la CIA, los archivos secretos, el mayordomo del Papa, ahora envuelva todo bien y arrójelo a la basura, no deje que los medios de comunicación lo sigan idiotizando y aplique esa función natural que nos diferencia de los animales. LA RACIONALIDAD, EL PENSAMIENTO, eso que nos falta tanto como la comida a los niños de África. Ahora, volvamos a la pregunta. La decisión tomada por el Papa es la mejor decisión tomada por un líder político. Benedicto XVI ha aplicado el pensamiento, y se ha dado cuenta que a su edad y con su salud no puede seguir dirigiendo a la iglesia, es decir, que Ratzinger ha preferido abandonar todas las riquezas, pinturas, oro, collares, anillos, poder porque considera que no puede dirigir la iglesia de la forma en que le gustaría. ESTA ES LA DECISIÓN MÁS HUMILDE Y SABIA que cualquier líder políitico pueda tomar, a diferencia de otros que saben que no están capacitados para sostener las riendas de un país, pero su ambición por el poder es lo único que respiran a diario (CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD ES PURA COINCIDENCIA).

Por esta razón me parece inútil y estúpido justificar esto de otra manera. Porque para la sociedad es mucho más lógico decir que cuando el Papa renunció Dios envió un rayo sobre el Vaticano anunciando  el futuro incierto y oscuro que le depara a la iglesia y como la llegada del Papa negro está más cerca que nunca. Yo creo que ha durado más tiempo la profecía del Papa negro que los 600 años de la renuncia entre dos Papas. Y de aquí solo surgen teorías más lógicas como que "hemos vivido en un tiempo oscuro y a partir de ahora surgirá un nuevo tiempo, el tiempo en que el nuevo Papa luchará contra las fuerzas del mal que asechan a la iglesia". 

Eso lo hace sonar como si el próximo Papa será mas bien un superhéroe y tendrá que usar el poder de su anillo y la fuerza de su bastón y los kilos de oro que carga consigo para destrozar a la fuerzas malvadas que asechan a la iglesia. Ya veremos al nuevo Papa usando sus superpoderes para acabar con los enemigos de la iglesia, las malvadas viejas que se sientan en los primeros bancos de la iglesia cuyos crímenes son verle el culo al cura, hablar mal de su vecina y no asistir a los rosarios semanales.

Tampoco puede faltar a la prensa magnificando la importancia del nuevo papa en el mundo, como si se tratase de la elección del Rey del mundo. Como el nuevo papa al ser más liberal podrá recoger de nuevo a los jóvenes, podrá generar un nuevo mundo, podrá incluso acabar con la crisis económica, podrá hacer que nadie caiga en pecado y devolverá la fe a la Tierra.

Cuando, vamos a estar claro, todos sabemos que va a pasar después del cónclave. Envés de resumirlo en dos líneas les voy a demostrar como seguramente lo verán en sus televisores.

Allí está, la plaza San Marcos, la gente con velas reunidas con ojos lagrimosos en frente de la imponente edificación del Vaticano, la Santa Sede. Comienza la elección de un nuevo Rey, una elección Divina, una elección en la que Dios bajará de los cielos y formará parte del mismo escrutinio para escoger un lider, un lider que nos dominará a todos, que nos guiará a todos a la luz o a la destrucción a la oscuridad y desatará las llamas del infierno sobre nosotros. De pronto, en mitad del día cuando el dolor de pie y la cadera de las ancianas ya no puede sostenerlas más, aparece el mensaje de Dios, Jesucristo ha tomado la más difícil decisión que ningún ser humano está capacitado mentalmente para tomar, HABEMUS PAPA. Y entre las cortinas rojas, en lo más alto del imponente edificio aparece la diminuta figura del hombre que cambiará por completo el destino de nuestra tierra, todo el poder y las riquezas está en sus manos, todas las riquezas y las almas de las personas han sido entregadas y encadenadas a él. Sólo él tiene el poder de llevar el mundo hacia adelante. El nuevo Papa ha elegido su nombre. EL MOMENTO MÁS IMPORTANTE. Con esta acción ha dejado de ser mortal y ahora ha formado parte de las más grandes deidades, la multitud se inclina hacia su nuevo Rey esperando a que todas sus esperanzas sean satisfechas. La multitud llora, canta, celebra. Y nos tenemos que aguantar 24 horas de la televisión repitiendo constantemente el humo blanco apareciendo de la chimenea, el alma de Dios que se dispersa y vuelve a los cielos.

Y cuando apagamos el televisor existe entre nosotros un miedo y una emoción, un sin fin de dudas. Vamos a misa ese domingo, empezamos a asistir a la iglesia más cercana a escuchar la palabra de Dios, pero esto sólo dura una semana, hasta el momento en que los canales se dan cuenta que han transmitido 600 veces el mismo contenido y que ya han acabado con todas las permutaciones y combinaciones posibles para transmitir el mismo programa en diferentes horas. Y luego la gente vuelve a sus trabajos, y a su rutina, a seguir trabajando para tratar de mantener a sus familias o a seguir estudiando para algún día tener un trabajo, abandonando ese sentimiento e incluso olvidando la elección papal, porque probablemente al sintonizar el mismo canal ahora estarán hablando de Kim Kardashian o de algo escandaloso o trágico que habrá sucedido en algún rincón de Estados Unidos. 

Esto no quiere decir que sea ateo. Yo creo en Dios, y rezo todas las mañanas. El problema es que la prensa nos termina vendiendo no una noticia, sino una película, una película de acción, aventura y últimamente incluso hasta con magia y efectos especiales. ¿Cuál es la función de un Papa? Simplemente recorrer el mundo y condenar al fuego eterno a los pedófilos, los que usan condón y los que abortan. Además de sentarse en su trono de oro con su capa y su bastón a dar la misa todos los domingos. FIN. PUNTO. Pero la prensa nos lo muestra como el salvador divino, el hombre capaz de cambiar nuestra percepción del mundo o incluso volvernos su esclavo. 

He allí mi crítica. Porque es que la prensa lo hace con todo. Con el supuesto fin del mundo el 21 de Diciembre de 2012. Con las teorías proféticas y complots terroristas que nos lo recuerdan cada 11 de septiembre. Con cada ataque de algún psicópata en estados unidos. Y es algo que se ha vuelto tan recurrente que termina siendo agotador e incluso dañino. Es como comer pollo todos los días, quizás lo aguantamos hasta un mes pero luego tenemos que comer algo distinto. Sucede lo mismo con la prensa en donde todo los detalles insignificantes son "exclusivos" o de "ultima hora".

Es por eso que en vez de seguir promocionando la importancia del nuevo papa que podría CAMBIAR TODO NUESTRO MUNDO. Yo más bien pediría que en vez de darle tanto enfoque a la elección de un nuevo Papa, se comience a ponerle atención a la elección de un nuevo medio de comunicación para el mundo.

Comentarios